








Fotografía documental
c/ Ximenez, 22 3º
12002 Castellón
(Junto al Teatro Principal)









Publicado por Blank Paper Castellón en 21:49
Etiquetas: Fotografía
Publicado por Un Planeta Gris en 19:28 49 comentarios
Etiquetas: Música
Publicado por Un Planeta Gris en 10:18 0 comentarios
Etiquetas: Música
Publicado por Un Planeta Gris en 10:11 0 comentarios
Etiquetas: Ocio
antes de escribir Wachtmen, Alan? Es intensa, dura, como su nombre; Taxista, y punto. Es tan dura, que su visión repetida puede tener efectos perjudiciales para la salud mental. Así te has quedado Mr. Moore. El cine influye en el cómic y viceversa. Este comercio de ideas entre formatos no es equilibrado. La balanza comercial tiene déficit en uno u otro sentido dependiendo de modas. Últimamente vemos que el tebeo tiene gran influencia en el cine. En ambos artes (lo de artes a veces, las menos, claro) la locura ha sido un tema recurrente. La locura de Travis es semejante a la de Batman pero más exacerbada. El Joker, sin embargo, es una de las mentes más deformadas que ha dado el mundo de la viñeta. . Desde 1940 ha ido evolucionando. Han sido casi 70 años hasta llegar al estado de máximo desorden mental. Las leyes de la entropía han funcionado correctamente. Incluso, si te metes mucho en el papel hasta te dan ganas de suicidarte. Bueno, supongo que si te metes en general.
En la última película de Batman, El Caballero Oscuro, el Joker es creíble, muy loco, muy malo, muy criminal, pero esto en la época de la televisión ya no sorprendía a nadie y en la de Internet menos todavía.
ética de los payasos que forman la banda del Joker influye directamente en la película del Caballero Oscuro. El Joker encerrado en el manicomio de Gotham va a ser rescatado por su “novia”. Una historia de amor y locura, permítanme la redundancia.Publicado por Nono en 10:00 1 comentarios
Etiquetas: Literatura
Publicado por Anónimo en 10:00 0 comentarios
Etiquetas: Social
ena época de aluvión de blokbusters, ya que en el último mes han llegado a nuestras pantallas taquillazos de la talla de X-Men Orígenes: Lobezno, Star Trek o Ángeles y demonios - que por cierto aún no ha soltado el primer puesto en recaudación y se ha convertido en la película más taquillera de lo que llevamos de 2009 - llega esta semana uno de los estrenos más esperados del año - otro más -, que muy posiblemente se encarame al primer puesto del Box Office y no lo suelte hasta la llegada de la no menos esperada Harry Potter y el Misterio del Príncipe - 15 de Julio -. Estamos hablando de Terminator Salvation. Se diría oficialmente que ésta es la cuarta entrega de la saga Terminator, por más que yo reniegue profundamente de la lamentable tercera parte, un infame producto propagandístico al servicio del Arnold Schwarzenegger futuro Gobernador de California cuyo único objetivo fue retirarse de su personaje más emblemático salvando a la humanidad en una gran producción. Olvidando esta desafortunada tercera parte, estamos hablando de dos películas - Terminator (1984) y Terminator 2 (1991) - que para mí suponen un hito indispensable en la historia de la ciencia-ficción de las últimas décadas. La primera Terminator supuso una interesantísima revisión del mejor cine de hombre vs. máquina recogiendo gran parte de los recursos estilísticos de clásicos imprescindibles como Blade Runner o 2001: Una odisea en el espacio, y suponía una película de referencia de un todavía desconocido director, James Cameron, que rodaba un título clave con muy poco presupuesto y un actor semidesconocido de nombre casi impronunciable. Su secuela, que llegaría al inicio de la siguiente década: Terminator 2, esta vez con presupuesto más holgado, se concebía casi como un remake de la primera, en estructura, guión y paralelismos metadiscursivos, y se convirtió en uno de esos ejemplos que ya se utilizan para rebatir el célebre "Segundas partes nunca fueron buenas". El hito en el género de la ciencia-ficción de los noventa que marcó Terminator 2 no fue desbancado hasta siete años después, con la llegada de la ya mítica Matrix que renovaría estilísticamente los usos y las formas de este tipo de cine. Con todo ello, llega ahora Terminator Salvation, mucho más cercana a estas dos primeras que a la indigna tercera parte. Sin embargo, no está ni mucho menos a la altura de las originales, lo que la sitúa en un interesante y cómodo punto medio de la saga. Como me niego rotundamente a intentar explicar la trama espacio-temporal de la saga - algo con lo que podría escribirse un tratado - simplemente me remitiré a que se sitúa en el año 2018, en el post-holocausto en que las máquinas han tomado el control del planeta y han iniciado el exterminio de la humanidad. Sólo un pequeño grupo de la resistencia les hace frente, y su líder es, obviamente, John Connor, interpretado esta vez por un Christian Bale - reclamo actoral del filme - a quien, sinceramente, yo le veo más ajustado en el papel de las recientes Batman de Nolan que aquí. La película funciona como un curioso batiburrillo de Transformers, por aquello de que ahora hay "mototerminators", "miniterminators", "terminators que se transforman en aviones"..., Salvar al soldado Ryan, por el evidente contexto bélico de la cinta y por el hecho de que el objetivo de John Connor enmedio de este entuerto sea encontrar a su padre y salvarlo; y El amanecer de lo muertos, pues este escenario apocalíptico, con nuevos engendros medio humanos-medio máquinas vagando por territorios devastados nos recuerda en ocasiones al cine de zombies del mítico George A. Romero. Dicho esto, encontraremos en Terminator Salvation elementos de suficiente interés como para encontrarla entretenida y conferirla una opción recomendable, toda vez McG, director de esta entrega - que en su discutible curriculum tiene la dirección de las dos películas de Los Ángeles de Charlie y la producción de series como O.C. - está a años luz de James Cameron, y eso se nota. No faltan tampoco guiños a los fans de la saga - entre quienes me incluyo, si aceptamos como saga sólo a las dos primeras... - como la primera aparición de John Connor pisando un cráneo endoesquelético de Terminator - referencia simétrica a las primeras imágenes de la saga cuando las máquinas destrozaban cráneos humanos - o incluso citas célebres como: "Volveré", "Ven conmigo si quieres vivir" o aquella insalvable pregunta tan Terminator como "A qué estamos hoy?... ¡De qué año!"
estrena la producción francesa Coco, de la rebedía a la leyenda de Chanel, como siempre mucho mejor en su título original Coco Avant Chanel, que explica precisamente eso, cómo era Coco antes de ser Chanel. La película se sitúa a finales de siglo XIX, principios del XIX, con la muerte prematura por tuberculosis de la madre de Gabrielle Channel - que éste es su nombre verdadero -, dejándola huérfana a los 12 años. Ante el desinterés de su padre, es internada en un orfanato, y con una adolescencia difícil, se convierte en una veinteañera que actúa en un cabaret de mala muerte cantando la canción "Qui a vu Coco dans l'Trocadero" - de donde sacará su famoso nombre. Un día, a lo Pretty Woman de época, un adinerado vividor le ofrece que se vaya con él, para introducirla en las élites sociales de la Francia de la época. Así, este hombre se convierte en su amante y protector, y la joven Coco Chanel empieza a ver en las vestimentas de las mujeres de la alta sociedad una oportunidad de transgredir los oxidados arquetipos de la moda de entonces, pues ella, de modo autodidacta, se defiende con las tijeras y el hilo. El principal problema de la película reside en que se limita a reflejar el triángulo amoroso que pronto aparecerá cuando Coco se enamora de un jugador de polo al que conocerá en uno de sus numerosos encuentros sociales, y huirá del intento de retratar la historia de la moda de la época, como cabría esperar en un título de estas características. Sólo al final, en la escena del desfile, veremos un poco de cómo, precisamente, Coco se convierte en Chanel. Por cierto, que la actriz elegida para dar vida a este icono de la moda es Audrey - Amélie
el último estreno de la semana - de los que llegan a Castellón, por supuesto - es Los mundos de Coraline, película de animación en stop-motion del director de Pesadilla antes de Navidad - que no, no es Tim Burton - Henry Selick. Aquí, Selick sigue con esa estética oscura, gótica y tétrica tan influenciada por Burton - que sí produjo sus dos anteriores Pesadilla antes de Navidad y James y el Melocotón Gigante - en una historia donde la niña Coraline - cuyo nombre es un homenaje a Carolyn Jones, la actriz que interpretaba a Morticia en La Familia Adams original, vaya referente! - viaja a un mundo paralelo - una suerte de cruce entre Las crónicas de Narnia y El laberinto del fauno - donde cree es mucho más feliz, hasta que llegarán los problemas... Aviso que NO ES UNA PELÍCULA PARA LLEVAR A LOS NIÑOS, puesto que en los preestrenos muchos de ellos han huido despavoridos... No todas las películas de animación han de ser necesariamente para críos, y este es un ejemplo. La película tiene ciertos pasajes incómodos o desagradables - como el hecho de que la niña deba coserse botones en lugar de ojos - que no hace que sea del todo indicado para miradas no adultas. Pese a ello, la imaginación, la música - que no es de Danny Elfman pero tiene clara inspiración de sus burtonianas composiciones -, sus colores e incluso su moralina final, además del hecho de que pueda verse en cines selectos en tres dimensiones, hace que sea una opción recomendable para este fin de semana.Publicado por Iván Bort Gual en 9:30 0 comentarios
Etiquetas: Cine
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Etiquetas: Música
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Etiquetas: Música
Publicado por Blank Paper Castellón en 10:00 6 comentarios
Etiquetas: Fotografía
Por Andrés Craig,
Informática, diga. ¿Ha probado apagar y volverlo a encender?

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Etiquetas: Cine
Publicado por Iván Bort Gual en 10:00 0 comentarios
Etiquetas: Cine
Publicado por Un Planeta Gris en 11:12 0 comentarios
Etiquetas: Ocio
Publicado por Un Planeta Gris en 9:44 2 comentarios
Etiquetas: Música
Este viernes 22 de mayo, a las 20:00 h continúa en el EACC el ciclo Espaisonor con la presentación de Miriam Reyes.Publicado por Un Planeta Gris en 9:40 0 comentarios
Etiquetas: Música
Publicado por Un Planeta Gris en 9:38 0 comentarios
Etiquetas: Teatro
Por Gunspector,
NACHA POP. Más números, otras letras. DRO 1983
Publicado por Un Planeta Gris en 10:00 2 comentarios
Etiquetas: Música
Publicado por rojoabril en 10:00 0 comentarios
Etiquetas: Literatura



Publicado por Héctor en 10:00 4 comentarios
Etiquetas: Ocio
Las calles de arena
PACO ROCA
Ed. Astiberri, 2009
Un pobre muchacho se pierde en un barrio viejo… pero se pierde de verdad. Los días pasan y él continúa sin poder llegar a su casa. Las calles de arena es un álbum hinchado con la neurosis de Kafka, o con los universos descorazonadores de Melville o Beckett. Las arquitecturas de este barrio indescifrable son cárceles de Piranesi, o incluso paradojas de Escher. Pero la historia se salva de la desesperanza kafkiana gracias Winsor McCay, Calvino o Miyazaki. Es decir, gracias a abrazar la magia del sinsentido. Si la situación del protagonista, perdido absurdamente en las calles de su propia ciuda, pudiera ser pesadillesca, el mundo que se encuentra en un universo onírico, como los niños de El viaje de Chihiro o El Mago de Oz, donde se descubren nuevas verdades y posibilidades. Los variopintos personajes de esta aventura son fantasías de Miyazaki o metáforas borgianas. Un espectáculo para los ojos y la mente del espectador.
Metáfora tras metáfora, el universo que dibuja Paco Roca es fantástico en la forma pero, en el fondo, pasmosamente realista. Llegamos tarde a unos recados, atajamos por un barrio, nos perdemos, pasamos horas dando vueltas, nos sorprende la noche, buscamos un hotel, no conseguimos salir del barrio, buscamos un trabajo para poder vivir en el barrio, del que queremos salir, pero trabajo no nos deja tiempo, estamos cada vez más perdidos… Una metáfora cristalina de los complejos senderos en que a menudo se pierden nuestras vidas.
Si Paco Roca mereció el Premio Nacional de Cómic 2008 por su encomiable álbum Arrugas, con Las calles de arena se lanza hacia el extremo contrario. Arrugas es un tebeo sobre el alzheimer y la demencia senil, tratado con una sinceridad cruda a la vez que con una sensibilidad muy íntima. Para realizarlo, el autor se entrevisto con muchos ancianos que padecían estas dolencias, cuyas historias ficcionaliza en el álbum. En Las calles de arena sin embargo, se da la libertad de desarrollar una aventura onírica en un universo fantástico. Aún así, sus personajes borgianos son siempre tan auténticos como cualquiera de nosotros. Tanto en un tebeo como en otro, la poesía de Paco Roca es personal, sincera y tan maravillosa como lúcida.
Publicado por álvaro zarzuela en 17:49 0 comentarios
Etiquetas: Historieta











Publicado por Susi.a en 10:00 3 comentarios
Etiquetas: Arquitectura, Arte