Escapadas Cercanas: Morella

Esta vez la escapada propuesta es más conocida pero no por ello menos grata.

Quién no se ha emocionado alguna vez, al ver aparecer tras un recodo de la carretera, la ciudad de Morella en la colina, con su castillo, sus poderosas murallas, su acueducto, sus casas blancas de tejados rojos...o quién no ha pensado que hacía demasiado tiempo desde su última visita, al llegar a sus muros.

Adentrarse en el recinto amurallado por cualquiera de sus puertas (Sant Mateu, Sant Miquel, de los Estudios...) es encontrarse ante un laberinto de calles concéntricas y radiales, que conduce casi inevitablemente hacia lo más alto: el castillo, que invita desde el primer momento que se avista la ciudad, a alcanzarlo y contemplar a vista de pájaro el paisaje que la rodea. Esa orografía de relieve tan abrupto y montañoso que caracteriza a la comarca de Els Ports.

Vale la pena perder el resuello en los continuos repechos ya que en cada calle se suceden arcos góticos, porches, casas solariegas, fachadas con vigas entramadas, retablos de azulejos y pequeñas capillas. Lo que invita al visitante a pasear sin rumbo fijo y sin prisas.

La calle Blasco de Alagón, con sus bajos porticados, es una de las imágenes más características de Morella. A su cobijo, se celebra todos los domingos un mercado tradicional, donde se pueden comprar productos típicos como embutidos variados, dulces como los flaons rellenos de requesón y almendra picada, o ejemplos de la famosa artesanía textil morellana (mantas, alforjas y telas hechas a mano, donde predominan los colores rojo, verde y negro, ).

Aparte de la visita al castillo a través del convento de Sant Francesc, merece la pena visitar la Iglesia Arcipestral de Sta. María la Mayor, de los siglos XIII-XIV, donde destaca el Pórtico de la Gloria, de estilo gótico, y ya en el interior el coro.

Por último, no hay que marcharse sin haber degustado la gastronomía morellana en algún mesón o restaurante de la ciudad.Casa Roque, Mesón del Pastor o Cardenal Ram, son buenos ejemplos. Y si es época de trufas (invierno), no dudeis en probar los menús de degustación realizados a partir de esta pequeña joya de color negro.