Y no es broma, que conste. La prueba, aquí.
Instalar maceteros en la vía pública no es delito ni va contra ninguna ordenanza, al menos que sepamos. Esta semana han tocado 24 nuevos maceteros en la calle San Cristóbal, cerquita de la plaza Mallorca, pero todo forma de un plan diseñado para presuntamente embellecer la ciudad, como si las plantas y las esculturas pudieran solucionar algo.
La gracia está en colocar los maceteros con performance incluida, con el discurso, con la foto y con el folclore típico de las pequeñas grandes ocasiones.
Frases:
“… con el fin de embellecer nuestra ciudad, uno de los principales objetivos del Ayuntamiento de Castellón...”.
“Hemos instalado en la plaza Santa Clara, que son diez, y en la calle Colón, que son más de cien, siempre con el fin de embellecer la capital de la Plana y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos”.
“El Ayuntamiento quiere y apuesta por una ciudad guapa en la que dé gusto pasear”.
Esta iniciativa contribuye a que la ciudadanía “se sienta más orgullosa de su ciudad”.
Ya será menos, ¿no?
The Treasures of Long Gone John
Hace 6 años
4 comentarios:
mi pesadilla es la endogamia castellonera, un clásico...
A mi la endogamia castellonina no me afecta. Cada vez que mi abogado dice que tiene que presentarme a un amigo muy majo, salgo corriendo. Pero lo de los maceteros si me afecta, que mi coche no cabe en ningún sitio y me gasto medio sueldo en parkings...
Y lo peor es ver los maceteros llenos de plantas muertas. ¿Es que nadie las riega?
Ahora pueden poner unas girnaldas de papel y llamar a los principes de Asturias para inaugurarlos. Es que las cosas importantes hay que hacerlas a lo grande.
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